Después de que vemos a jóvenes atacando en escuelas y centros comerciales, debemos resaltar que estamos inmersos en una cultura de siempre sentirnos mal por lo que nos dicen y lo que sucede en nuestro entorno, hasta llegar al grado de maltratar a las personas.
Sabemos que son temas que muchos no están de acuerdo y que pudieran sentirse agredidos u algunos otros no podrán concordar, pero si bien es cierto es que siempre se debe tener respeto hacia los demás- en eso no cabe duda, pero actualmente nos encontramos dentro de una sociedad que no tolera nada y que todo le ofende.
Al pasar esta situación, pues ocurren dos detalles: Una, que te sientas mal y que no puedas seguir adelante con tu vida de una forma plena; y la segunda, es que tengas una reacción negativa y se detone con reclamos y golpes o hasta lo más grave como ir a tirar balazos en escuelas y centros comerciales.
Ahora toda la gente es más sentida y de todo se siente agredido, pero en lo que refiere a los menores, es que en lugar de hacerlos fuertes, lamentablemente los estamos haciendo más débiles- porque con este sentido y forma de ser, lo único que lograremos es que se alejen de la gente o estos de ellos. Dentro de su interior existe mucha confusión y debilidad interna.
Hay muchas personas que prefieren mejor no entablar una plática, porque tienen que pensar muy bien las cosas, ya que desconocen como reaccionara la demás gente. Y esto sucede más frecuente dentro de los whats app o mensajería electrónica.
Me decía un conocido que una compañera estaba completamente ofendida y enojada porque llevo a la oficina pan para tortas y de dulce. Porque decía que era alérgica al gluten. Lo peor es que en lugar de poder arreglar la situación y entablar una buena relación, decidió quedarse ofendida- porque el mismo se ofreció en comprarle otra cosa, pero no quiso y siguió molesta.
Es una situación que si bien ha mejorado el entorno al respeto y contra el bullying, por así decirlo, pero también se están creando personas que con todo se ofenden y todo lo ven negativo y contra ellos.
No es un dato científico, pero de las personas conocidas que siempre tienen un tono radical y sentido, por lo regular siempre les duela la cabeza o se mantienen enfermos.
Hablando de medios masivos como la televisión o el internet: Es que antes podías decir de broma cualquier tipo de comentario y que no pasaba a mayores; así como en los programas del Chavo del 8, donde podían decirle cosas a los personajes, como gordo, marrano o ratero al chavo y no pasaba nada, incluso te podías reír, pero ya son cosas que en televisión no se pueden hacer y ahora son híper cuidadosos de todo lo que sale en medios. Incluso había un poco más de libertad en transmisiones como el cable y el Netflix, pero no siempre.
Con esto no quiero decir que la gente deba aguantar todo tipo de comentarios ni ofensas, pero lo que si es cierto es que estamos educando a personas que les afecta demasiado lo que dice la demás gente, en lugar de tener la capacidad de lidiar con el problema y resolverlo de forma inmediata para que no vuelva a suceder. Cabe señalar que esta nueva cultura o reglamentos deben ir enfocados para los problemas sumamente reales y acosos intensos, pero no para detalles que muchas veces pueden resolverse ahí mismo, porque en veces cae en lo ridículo.
Ahora en las oficinas y en las escuelas está existiendo una falta de empatía y buen entendimiento y hasta de cercanía con los compañeros por no tratar de no decir cosas que se puedan malentender.